La enfermera del área de Atención al Niño Sano, en el Hospital J. M. de los ríos, daba la misma información a todo el que se acercaba a la puerta: no hay consultas hasta nuevo aviso. Los médicos decidieron comenzar ayer las asambleas permanentes en los centros de salud de Caracas, lo que significa que sólo se atienden emergencias y casos especiales: pacientes con cáncer o con problemas nefrológicos, entre otros.
Yamaika Silva llegó jadeando a la Atención al Niño Sano, después de haber subido los tres pisos con su bebé de dos meses. Al escuchar a la enfermera, se devolvió. "Venía a ponerle la vacuna pentavalente, que no consigo en ninguna parte sino aquí. Me dijeron que estuviera atenta a los anuncios, pero a mí no me parece que paralicen la consulta de los muchachos pequeños", dijo.
Muchas personas llegaban con sus niños y se devolvían.
A esa área acuden más de 60 pacientes en las mañanas para aplicación de vacunas y consultas. Mensualmente, en promedio, atienden a 1.000.
En el área de Cardiología, la madre de un paciente aseguró que la atención se prestaba sin problemas. En la de Neurología había un cartel pegado que informaba la suspensión de la atención médica. Alrededor del mediodía, una comisión de Recursos Humanos pasaba revista a los servicios y anotaba observaciones en un cuaderno.
La sala 26 del Hospital José María Vargas, en la que se brindan consultas de atención primaria que después son referidas a los especialistas, estaba vacía ayer a las 11:00 am. "Esto normalmente es un poliedro", dijo una enfermera. Aseguró que hay entre 4 y 6 médicos para atender a 18 pacientes diarios.
Ayer sólo trabajaron 2, que recibieron a pocas personas con casos muy puntuales.
"Hemos estado en comunicación constante con los pacientes y sus familiares. La gente ha sido bastante comprensiva", dijo Carlos Marín, presidente de la Sociedad de Residentes del Hospital José María Vargas.
En la sala 12, donde funciona la emergencia, había movimiento de gente: las personas esperaban en las sillas del pasillo. Los hospitalizados también contaron con atención.
Un médico, que prefirió mantenerse en el anonimato, dijo que harían la cirugía de una paciente con hernia que tenía meses en espera.
En el Hospital Domingo Luciani había una fila de personas que aguardaba para entrar al edificio. Un médico dijo que el paro se cumplió en ciertas consultas. Un enfermero aseguró que algunas se suspendieron, pero no en su totalidad.
Los médicos de buena parte de los servicios del Hospital Clínico Universitario también acataron la paralización.
"De todos modos, si no se hubiese llamado a paro, no habrían podido hacerse operaciones electivas porque hacía falta una solución, indispensable en estos casos", dijo un especialista de ese centro de salud.
Reinaldo Contreras, del comité de conflicto de la Federación Médica Venezolana, afirmó que el llamado a las asambleas permanentes en los hospitales de Caracas se cumplió ayer en 85%: "La idea era que 98% del personal asistiera a reuniones en el auditorio o la biblioteca de su centro de salud. El 2% restante debía comenzar guardias de 24 horas para atender los casos especiales y emergencias".
Contreras aseguró que los centros del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales todavía no se han sumado a la actividad, pero lo harán.
Peticiones médicas.
"¿Qué más puedes parar este hospital?", se preguntaba un médico del Vargas. En ese centro de salud sólo funciona un quirófano. La emergencia, en lugar de encontrarse en un área especial para ese fin, está en una sala porque las remodelaciones no han terminado.
La situación de los hospitales impulsó al gremio de médicos a hacer esta protesta. Marín dijo que el reclamo se debe a los problemas de infraestructura de los centros de salud, la falta de equipos y materiales, los bajos salarios y la poca seguridad.
Yamila Battaglini, médica del Hospital J. M. de los Ríos, informó que algunos representantes de los niños se quejaron por la falta de consultas y, por eso, tienen pensado hacer asambleas para informar sobre la situación y sensibilizar.
"Esto no es un capricho de los médicos. Realmente estamos pensando en los pacientes, que son los más afectados por este problema. Nosotros queremos trabajar, pero en óptimas condiciones", dijo.
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