Agencias
Maracaibo.- Este domingo suman 15 días los que un grupo de trabajadores del barrido manual, pertenecientes al Instituto Municipal de Ambiente (IMA) de Maracaibo tienen en huelga de hambre, esperando que la alcaldía marabina revierta la decisión de la eliminación de esa institución, ya que el pasado miércoles se firmó el decreto, sin embargo no se ha publicado en Gaceta Oficial.
Maracaibo.- Este domingo suman 15 días los que un grupo de trabajadores del barrido manual, pertenecientes al Instituto Municipal de Ambiente (IMA) de Maracaibo tienen en huelga de hambre, esperando que la alcaldía marabina revierta la decisión de la eliminación de esa institución, ya que el pasado miércoles se firmó el decreto, sin embargo no se ha publicado en Gaceta Oficial.
Son siete trabajadores, cinco mujeres y dos hombres que son el sustento de sus familiares, los que tomaron esta iniciativa ante la indiferencia y la decisión arbitraria de la alcaldesa de Maracaibo, Eveling de Rosales, , quien no tomó en cuenta la orden del Tribunal Contencioso Administrativo, donde se le prohibía realizar reingeniería en esta corporación, aplicó la medida y fue respaldada por los concejales marabinos .
Un caso emblemático en esta huelga de hambre es el de la trabajadora, Yasmina García, quien tuvo que ser trasladada a un Centro de Diagnóstico Integral, por complicarse con neumonía el pasado lunes, pero este viernes retornó a las instalaciones del IMA, junto a sus compañeros que mantienen la huelga de hambre.
“Aquí regresé por mis hijos, tengo 57 años y por ellos regresé a la huelga, el doctor me dijo que no podía seguir, pero sigo en pie de lucha, tengo 12 años trabajando aquí (en el IMA) y voy a seguir, porque en todo este tiempo luchamos y logramos beneficios que ahora esta señora (alcaldesa) nos quiere quitar de un solo golpe”, expresó mientras las lágrimas corrían por su rostro.
Junto a la señora García se encuentran María Bautista, Gregorio Aguirre, Gledis Gandica, Ramón Arias, María Cuencas y Carmen Carrillo, quien expresó que ya tienen cuatro semanas sin cobrar, a pesar de que la medida de eliminación no se haya oficializado y por ende la alcaldía debería cancelarles los sueldos.
“La alcaldesa sigue jugando con nosotros, no piensa en los que vivimos alquilados, esto no es mentira, aquí somos seres humanos y nuestros hijos necesitan comer como lo hacen ella y sus hijos, mientras ellos lo tienen todo, nuestros muchachos no tienen un bocado para llevárselo a la boca, pero eso quedará en su conciencia”, señaló entre cortadas palabras.
Ante la indiferencia por parte de la mandataria local, el Sindicato que agrupa a los denominados salserines, siguen con la intención de llamar la atención en las calles, otro de los afectados por la arbitraria medida, Leonardo Barrios dijo que las calles no las dejarán, “las calles siempre han sido nuestro sitio de trabajo, ahora no las abandonaremos porque no vamos a descansar hasta que se haga justicia con nosotros”.
Hasta los momentos estos hombres y mujeres están a la espera sobre el recurso de amparo que introdujeron el pasado miércoles ante el Tribunal Contencioso Administrativo del Zulia, el cual está a cargo de la jueza Gloria Urdaneta, en el que solicitan se reviertan las acciones arbitrarias por parte del ayuntamiento marabino con los casi 2.000 trabajadores del IMA, quienes padecen las consecuencias por la eliminación del instituto.
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